miércoles, 27 de agosto de 2008

A remojo

Las migas se han resecado y no salen de la fuente,la dejaré a remojo,pienso mientras le doy con el estropajo...
Oigo la puerta de la calle.Entra por la puerta de la cocina,le recibo con una gran sonrisa.
-Hola-dice mientras me besa-¿qué comemos hoy?
-Pasta,no ha dado tiempo para más
-Perfecto,aunque yo prefiero otra cosa-dice con sonrisa pícara.

Levanta mi vestido y se arrodilla detrás de mí.Coge mi sexo con una mano mientras yo me abro de piernas para facilitarle el acceso.Empieza lamerme.Me excito con facilidad,no puedo evitarlo.Abre los labios de mi sexo con las manos y chupetea mi clítoris de una manera directa.Tanto que me duele,un dolor exquisito.Sigue así durante unos segundos más.Le pido que se levante y me penetre ya,lo necesito.Entra sin dificultad y mi vagina lo atrapa.Aprieto y soy plenamente consciente de cómo me penetra.Me encanta esta sensación,pierdo la cabeza.Me aislo de todo excepto de este gran orgasmo que llega.

Sin tiempo para recuperarme,sus dedos atrapan mi clítoris y juguetean con él.Soy incapaz de resisitir mucho tiempo más.Me desplomo sobre el fregadero y levanto las caderas para que llegue hasta el fondo de mí.Ya no puedo pensar.Tengo otro orgasmo bestial que me deja medio mareada.

Él acaba en un par más de embestidas,dentro de mí.

Caldona

2 comentarios:

The Seeker dijo...

joder con las migas (migas de gañan??). Normal que si estan resecas se pase directamente al postre jeje.

Muy buenos tus relatos, los escribes tan bien que da envidia... tanto por el contenido como por la forma.
Un saludo.

Caldona dijo...

Muchísimas gracias por tu opinión.Me alegra que te gusten.

Un saludo :).